CASANDRA: LA PROFETA OLVIDADA. CIEN AÑOS DE UN ESTRENO

Sara Akkad Galeote
Centro de Documentación Teatral. INAEM (Ministerio de Cultura)
sara.akkad@inaem.mcu.es

Resumen: El pasado 28 de febrero de 2010 se cumplieron 100 años del estreno de Casandra, drama en cuatro actos de Benito Pérez Galdós. A diferencia de lo que sucedió en su día, hoy, el teatro del escritor canario apenas goza de presencia en los escenarios españoles, razón por la que dicho centenario ha pasado desapercibido. Por este motivo hemos querido rendir homenaje al autor y su obra recordando en qué contexto se produjo su estreno y cuál ha sido su repercusión en la escena española.

Palabras clave: Galdós, Casandra, Teatro español, 1910.

Abstract: Last February 28, 2010 it was fulfilled 100 years of Casandra's premiere, drama in four Benito Perez Galdós's acts. Unlike what there happened in his day, today, the theatre of the Canary writer scarcely he enjoys presence in the Spanish scenes, reason for which the above mentioned centenary has gone unnoticed. For this motive we have wanted to produce honoring to the author and his work remembering in what context his premiere took place and which has been his repercussion in the Spanish scene.

Key words: Galdós, Casandra, Spanish Theatre, 1910.

1. 2010, AÑO DE CENTENARIOS

El año 2010 ha sido testigo de varios centenarios culturales dignos de recordar; así, hemos asistido a la celebración del 100 Aniversario de la Residencia de Estudiantes y hemos apagado 100 velas al poeta Miguel Hernández; también cumplieron años hombres de teatro como Jean Genet (1910-1986) y Modesto Higueras (1910-1985), figuras de gran trascendencia en el desarrollo de la escena del siglo XX. Sin embargo, en este boom de conmemoraciones culturales ha pasado desapercibido un centenario que merece el recuerdo de las gentes de teatro; nos referimos al estreno de Casandra, puesta en escena por primera vez en el Teatro Español de Madrid, el 28 de febrero de 1910: un drama en cuatro actos de Benito Pérez Galdós, a partir de la novela homónima de 1905.

2. GALDÓS, UN HOMBRE DE TEATRO

Es cierto que el teatro de Galdós no ha tenido eco notorio después de su muerte, algo que resulta curioso si pensamos en la gran repercusión de que gozó en su tiempo, avalada por los cronistas más destacados del momento. Una cuidada selección de críticas de los estrenos, con un estudio previo, se puede leer en Los estrenos teatrales de Galdós en la crítica de su tiempo (Berenguer, 1988). Ningún estreno del autor pasó desapercibido en la escena española y algunos de ellos suscitaron destacadas polémicas, como la acontecida ante el estreno de Electra, en 1901, sin duda la más sonada del dramaturgo, que se produce dentro del debate de la renovación de teatro español de principios de siglo XX. Algo similar sucedió con el primero de sus estrenos, Realidad, en 1892, hito que señalan algunos críticos como el de entrada de la corriente naturalista en España, al hilo de la influencia de autores europeos como Ibsen, Strindberg o Zola¹. El teatro español de fines de siglo atravesaba momentos de crisis, aspecto que ha sido descrito suficientemente por diversos autores. La falta de renovación en la escena suscitó debates entre los escritores y críticos de la época; el caso más destacado es el de Clarín². Benito Pérez Galdós participó en la contienda verbal apostando por la naturalidad y el realismo en la representación, y a este empeño dedicará los últimos treinta años de su vida.

3. LA PRESENCIA GALDOSIANA EN LA ESCENA ESPAÑOLA

Hoy, el teatro de Galdós no forma parte del catálogo de obras más representadas de la escena española, aunque es cierto que algunas de ellas han tenido mayor fortuna que otras, y algunos de sus personajes novelescos han sido objeto de interesantes teatralizaciones. Sirva un rápido repaso de los principales títulos, que evidencian el grado de repercusión del Galdós dramaturgo tras su muerte:

Enrique Borrás (1863-1957) [fig. 1], uno de los grandes intérpretes que ocupan la primera mitad del siglo XX, quien ya estrenó en vida del autor Amor y Ciencia (Teatro de la Comedia, Madrid, 17-11-1905) [fig. 2], ha sido el encargado de llevar a escena y ponerse más veces en la piel de algunos de los personajes galdosianos. En 1940, repuso El abuelo en el Teatro Tívoli de Barcelona; seis años más tarde, se presentó con esta obra en el Teatro Alcázar de Madrid. En el 41, junto a Ana Adamuz (1886-1971), en el Teatro Lara de Madrid, estrena La loca de la casa, obra que repondrá con su compañía en varias ocasiones variando a la actriz principal: en el 43 en la Comedia de Barcelona, con Tina Gascó (1914-1973) [fig. 3] y seis años más tarde, en 1947, en el Teatro Infanta Beatriz de Madrid, junto a Isabel Pallarés.