Efemérides
El estreno de 'Mariana Pineda', de Federico García Lorca.
Teatro Goya de Barcelona,
24.6.1927
Margarita Xirgu y Alfonso Muñoz en el estreno de Mariana Pineda
Hace cinco años hicimos ya una nota en esta sección, saltándonos la norma de ofrecer efemérides en décadas redondas – treinta, cuarenta, cincuenta, noventa, cien años – para hablar de los ochenta y cinco años de un estreno en Barcelona que fue saludado con alguna frialdad por la crítica y un estreno en Madrid tratado como un triunfo.
Federico García Lorca no las tenía todas consigo. No estaba seguro del paso que había dado. Tenía la sensación de que aquella obra, Mariana Pineda, ya no se correspondía con su escritura. Estaba buscando cosas nuevas y acababa de entregar a Guillermo de la Torre una pieza breve que se titulaba El paseo de Buster Keaton, para que la publicase en la revista La Gaceta Literaria. Aquella historia de Mariana Pineda había pasado por varios borradores, por demasiadas dudas, a lo largo de años. Era una historia que conocía desde niño. Ahora le parecía algo lejano, porque la había dado por terminada hacía más de dos años y desde enero de 1925, cuando la dio por terminada, habían pasado muchas cosas.
Era su segundo estreno teatral, pero el primero había sido un fracaso rotundo. Fue al poco tiempo de llegar a Madrid: la actriz Catalina Bárcena estaba encantada con aquel Maleficio de la mariposa, pero el poco público que se acercó al teatro Eslava en aquellas siete funciones de 1920 no opinó lo mismo. El joven García Lorca estaba empeñado en demostrar a su padre que podía ganarse la vida con la literatura y el género que hacía aquello posible era el teatro. También él dudaba, llevaba meses considerando la posibilidad de preparar unas oposiciones a catedrático de literatura. El 5 de junio iba a cumplir veintinueve años y seguía viviendo de lo que le enviaba su padre. Una de las más importantes actrices del momento iba a representar su segunda obra teatral. Ya muy anciana doña María Guerrero, varias actrices se disputaban el favor del público: la Bárcena, Eugenia Zuffoli, Pepita Díaz de Artigas y Margarita Xirgu eran las principales; la catalana era la más valiente a la hora de buscar títulos y autores diferentes; y había aceptado la obra del poeta granadino, aconsejada por Cipriano Rivas Cherif, Melchor Fernández Almagro y Eduardo Marquina. El éxito que había obtenido con una obra de este último fue una de las razones que la llevaron a posponer el estreno a la temporada barcelonesa.
Así que el 24 de junio de 1927 en el Teatro Goya de Barcelona, Lorca veía estrenarse su obra con decorados de su amigo Salvador Dalí. Margarita Xirgu hacía Mariana Pineda; en el reparto, Carmen Carbonell, Eugenia Illescas, Pascuala Mesa, Julia Pachelo, Luis Peña (el padre), Alfonso Muñoz, Francisco López Silva y un Luis Peña todavía niño. Prácticamente el mismo elenco que unos meses más tarde, el 12 de octubre, llevaría la obra al “aristocrático” Teatro Fontalba de Madrid para inaugurar la temporada; el hecho de su estreno en Madrid en esas condiciones habla por sí mismo sobre el éxito que tuvo la obra. Con el tiempo, Mariana Pineda se reveló como una obra no tan extraña a la producción de Lorca, no tan lejana de Yerma, de Doña Rosita, de Bodas de sangre…
Mariana Pineda abrió una trayectoria de triunfos de García Lorca y una relación eterna del poeta con Margarita Xirgu, que volverá sobre esta obra en 1943, en el exilio argentino. Esta obra no regresaría a España hasta 1967, protagonizada por María Dolores Pradera.
