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Extracto de la noticia publicada en La Vanguardia , el 13.10.2014.
Entrevista con Lluís Pasqual, renovado director del Teatre Lliure

Imagen: www.teatrelliure.com

Entrevista con Lluís Pasqual, renovado director del Teatre Lliure

Pasqual ha resistido la crisis ganando espectadores

El patronato de la Fundació Teatre Lliure acordó por unanimidad renovar el mandato de Lluís Pasqual como director de la institución por cuatro años más, hasta la temporada 2018-19. Pascual (Reus, 1951), uno de los fundadores del Lliure en 1976, tomó el relevo de Àlex Rigola en la temporada 2011-12 en pleno huracán económico […]

El primer año fue duro: debido a los recortes, Pasqual tuvo que retirar tres espectáculos de la programación. Los espectadores cayeron de 79.515 a 73.000.Y apenas comenzada la temporada siguiente, en diciembre del 2012, como los recortes continuaban anunció un ERE de tres meses para todos los trabajadores del teatro, incluido él mismo. Un ERE que nunca llegó a materializarse gracias a que el Ayuntamiento de Barcelona acudió en ayuda de las debilitadas instituciones culturales de la ciudad. A partir de aquí, lo del Lliure ha sido un absoluto milagro. […]
¿Cómo ha recibido la prolongación de su mandato?
Lo tomo como un acto de confianza en el trabajo hecho estos años y eso me hace feliz. Un acto de confianza como los miles de espectadores que hemos ganado.
¿Tiene planes para el futuro del Lliure o, como dice una y otra vez, en estos momentos sobre todo hay que ser flexibles?
La flexibilidad extrema ha sido una cosa buena de la crisis. Nos hemos hecho mucho más porosos, permeables, plásticos a los movimientos de la sociedad, de la gente de teatro y de los espectadores. No quiere decir que no tenga un plan en la cabeza, […]
¿La compañía joven, con sus seis actores, ha sido uno de sus éxitos de estos años?
Ha salido muy bien, como lo demuestra ahora Victòria d’Enric V en Gràcia, que llena. Sus actores se han fogueado con clásicos, obras infantiles, autores catalanes actuales... Pero lo primero para consolidarse es que la compañía no se consolide, que se renueve. […] Los actores tienen que aprender y volar. Y no nos podemos permitir una compañía estable. Las más pequeñas de los países occidentales tienen al menos 30 actores, y ya no hablo de las alemanas, con 60 o 70.
¿Querría tener una compañía estable?
¡Y tanto! Me conformo con el modelo pequeño, no quiero los 80 de la Comédie Française. Es un placer trabajar así. Se crea una conexión mutua. […] Pero es que el dinero que dedica nuestra sociedad a esta parte de la cultura y el ocio que es el teatro es muy pequeña comparada con los países donde hace más frío y necesitan encerrarse en locales y escuchar música y ver teatro. […]
¿Cómo ve el mundo del teatro catalán tras estos años de dura crisis?
La reacción del gremio durante la crisis ha sido muy buena. Se nos ha acusado de ser victimistas, de vivir en la cultura del lamento y la subvención. Es un tópico, un lugar común. El teatro no es un arte muy subvencionado y frente a lo que sucedía la reacción ha sido positiva: se han abierto muchas salas pequeñas, la gente se ha liado la manta a la cabeza y se ha arriesgado a producir sus ideas, hay propuestas nuevas... No estoy seguro de que los responsables culturales se den cuenta de todo esto. Ver la reacción positiva de la gente del teatro y no eliminar el 21% del IVA es una barbaridad porque los esfuerzos se los come el IVA. […] Pero no me gusta hablar de los problemas del teatro en sí, porque hoy los tiene todo el mundo. (Justo Barranco)