Juan Ruesga¹²

1. En mi experiencia profesional, el público siempre ha valorado la escenografía como un elemento relevante del espectáculo que le ha permitido conectar con el mismo. Una escenografía espectacular ha sido habitualmente la tarjeta de presentación de un espectáculo, sobre todo para los nuevos públicos, por ejemplo de los musicales o de las nuevas propuestas circenses. Sin embargo creo que cada vez más una escenografía estilizada, poética y esencial es más apreciada por el espectador de teatro.


2. La situación ideal es que los actores entiendan que tu escenografía es el mejor espacio para desarrollar su trabajo en el espectáculo. Cuando se consigue es perfecto.  Para eso la escenografía debe partir de la propuesta de un microcosmos escénico tan definido que de un punto partida firme para el desarrollo de la interpretación, pero no tan cerrado que les impida desarrollar su creatividad.


3. El escenógrafo debe conocer la esencia y herramientas de la interpretación.


4. No en especial. Aunque mayoritariamente he hecho escenografías para teatro de texto, he tenido algunas experiencias como espectáculos urbanos de gran formato, como presentaciones de festivales, campeonatos, jornadas de celebración, etc. Pero la metodología ha sido la misma. De hecho, los considero trabajos escenográficos en toda la extensión del término.


5. Mis primeras escenografías para la compañía Teatro del Mediodía (Mercaderes de Ciudades, El Bello Adolfo, La Tempestad, La Marquesa Rosalinda [Fig. 22]....), tuvieron una fuerte repercusión en el sector por su enfoque y resolución. Si bien las escenografías más premiadas han sido Yerma (1998), Julio César (1996) y Ariadna (2008) [Fig. 23].


6. Sobre todo creo que he aportado una fuerte reflexión sobre nuestro trabajo, marcando pautas metodológicas a las que he dedicado mucho tiempo para explicitarlas y transmitirlas. La consideración de la escenografía como un elemento dramatúrgico y no ilustrativo del espectáculo es la búsqueda constante. Y el concepto de plástica escénica, en el que todos los aspectos visuales del espectáculo están coordinados y aportan dramatúrgicamente al espectáculo.


7. Creo que la estilización poética y estética que he perseguido desde el principio, huyendo de un realismo inmediato. Aún hoy en día sigo buscando en ese camino, cada vez más poético.


8. -


9. Como la mayoría de los oficios del escenario, la escenografía en España ha avanzado en mejor factura y presencia en el escenario. Sin embargo, no veo que esa mejora de realización haya correspondido con un avance significativo en la investigación y en la aparición de nuevas fórmulas escenográficas, en cuanto a la aportación dramatúrgica al espectáculo.


10. A lo largo de los años he sentido la necesidad de pasar a la producción artística y a la dirección de puesta en escena. Lo he realizado en los espectáculos urbanos sobre todo. Finalmente he dirigido algún espectáculo como Cuando yo era... del ballet Eva Yerbabuena, que ha sido premiado tanto mi trabajo como el espectáculo completo.


11. -


12. La utilicé en la escenografía de La Tempestad de W. Shakespeare, que produjo Teatro del Mediodía. Era una disposición simétrica con el punto de fuga central y los laterales con la fuga forzada para aumentar la profundidad de campo. Por otra parte, la utilización de la fuga ya era en sí misma una referencia al tiempo de la representación y a la propuesta metateatral que se planteó como opción dramatúrgica.


13. Habitualmente utilizo el boceto como herramienta de diseño y con abundancia de perspectivas de todo tipo. Creo en el dibujo directo e inmediato, y las perspectivas me interesan mucho pero realizadas como bocetos que reflejan de manera directa la idea escenográfica.